El objetivo principal de esta etapa será seguir potenciando y materializando las iniciativas detectadas y priorizadas en la macrozona, para poder fortalecer y enlazar a los y las investigadores, potenciando el capital humano CTCI en el territorio
El Nodo Desierto Vivo seguirá trabajando por cuarto año consecutivo en el fortalecimiento de las capacidades CTCi de la Macrozona Norte (Regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta y Atacama) y la articulación entre los actores del ecosistema CTCi, esto tras adjudicarse una nueva propuesta en el Concurso de “Nodos Macrozonales-Convocatoria 2024” de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), y en el cual participan la Universidad de Tarapacá, Universidad Arturo Prat, Universidad Católica del Norte, Universidad de Antofagasta y Universidad de Atacama y que desde su primer año ha sido ejecutado por la Fundación Parque Científico de la Universidad Católica del Norte (PCT). El director del Nodo será el Académico Fernando Álvarez Castillo, Decano de la Facultad de Economía y Administración de la UCN.
Es así como Fernando Álvarez, quien ha estado desde el génesis de este proyecto, comentó que: “el Nodo se ha constituido en un actor clave articulador del ecosistema de CTCI, catalizando iniciativas, levantando brechas, desafíos y oportunidades en los territorios para crear un desarrollo mucho más sustentable en cada una de las regiones de la macrozona. A través del trabajo del Nodo podemos visualizar visiones compartidas y visualizar desafíos para combatir las brechas que hemos detectado”.
En la instancia online participó la nueva Seremi de Ciencia de las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá, Alexia Vásquez, quien reafirmó su compromiso por “apoyar en la articulación con actores locales y nacionales del sector público y privado, y trabajar para que los Nodos sigan fortaleciendo las capacidades en CTCI de la ciudadanía, respondiendo a las demandas reales del territorio, sumado al esfuerzo que realizan las universidades regionales. Todos juntos somos clave para enfrentar los desafíos de manera efectiva, colaborativa y sostenible”.
Origen e historia de Nodo Desierto Vivo
El Nodo ya se ha adjudicado dos concursos previos, el primero de ellos el año 2020 y su desarrollo estuvo concentrado, generar un diagnóstico que permitiera levantar las capacidades CTCi de la macrozona norte, definir un conjunto de áreas o líneas estratégicas para las regiones de la macrozona y a partir de esto construir una Hoja de Ruta que permitiera definir una visión compartida y un conjunto de iniciativas, y tendencias que en un horizonte de corto, mediano y largo plazo permitieran ir disminuyendo las brechas detectadas.
Luego vino un segundo concurso, que abarcó los años 2022-2023, que le dio continuidad al trabajo del primer período, pero que además vino acompañado de un proyecto de fortalecimiento, el cual permitió acompañar el trabajo anterior con el diseño de una plataforma dotada de una base de datos que consolida las capacidades CTCi de la macrozona norte, lo cual permitirá conocer el trabajo que se está realizando en las universidades y centros de investigación de la macrozona, sus capacidades instaladas y generación de redes de colaboración entre los actores que puedan estar desarrollando temas similares, potenciando las sinergias y trabajo multidisciplinario.
El tercer año se adjudicó un nuevo concurso, denominado continuidad, que contempló los años 2023-2024 el cual permitió al nodo focalizar mejor su trabajo de articulación, diseminación del conocimiento y apropiación de los avances del Nodo, incrementando su cobertura en los territorios de la macrozona, convocando a un mayor número de actores y fortaleciendo las capacidades de los actores a través de la formación, la interacción y la generación de redes y colaboración multidisciplinarias. Este trabajo ha sido posible a partir de la ejecución de iniciativas priorizadas por la Hoja de Ruta del Nodo, su actualización y los desafíos de cada una de las regiones de la macrozona reflejados en sus instrumentos de planificación regional (como Estrategias de Desarrollo de los GORES y ERIs), generando importantes sinergias, redes y colaboración a partir de una serie de Talleres, Cursos, Webinars, Workshop y otros eventos que ha contemplado esta estrategia de dinamización hacia el territorio y el esfuerzo por movilizar el conocimiento hacia cada rincón de la macrozona.
Articulación con otros NODOS
En esta fase ha sido importante la articulación del Nodo con el trabajo iniciado en estos años por los Laboratorios Naturales, otra iniciativa de ANID que viene a fortalecer el ecosistema de CTCi en los territorios y que en el caso de la macrozona norte ha beneficiado a 3 iniciativas (LabAncestral, LANDATA y recientemente Laboratorio Natural Salares), que se suman al trabajo que venía desarrollando el Nodo y que hoy podrán aunar esfuerzos para fortalecer la CTCi en los territorios de la macrozona y promover la transferencia del conocimiento y a través de ello generar impactos reales que marquen el desarrollo y futuro de cada una de las regiones que conforman esta macrozona.
Desafíos 2024 – 2025
En este cuarto año de ejecución se continuará la dinamización de la Hoja de Ruta, movilizando el conocimiento hacia el territorio y de esta manera generar mayor transferencia del conocimiento y tecnología para apoyar el desarrollo de las regiones de la macrozona y de los diferentes ejes estratégicos priorizados por el Nodo (Agricultura del Desierto, Astronomía, Energías Renovables, Minería Sustentable, Diversificación Productiva y Recursos Hídricos). Así también en este cuarto año se espera mayor cercanía con otras instancias que están vinculadas al desarrollo de la CTCi en el contexto de la macrozona, como ser; Comité CTCi de cada región, Seremi Macrozonal de CTCi, Gobiernos Regionales, Representantes del sector privado y social organizado.