El 2030 comenzaría su funcionamiento con un estándar de máxima seguridad, ubicado camino a San Pedro de Atacama
Debido a las declaraciones de autoridades sobre la puesta en marcha de la cárcel para Calama el año 2030, el alcalde de la comuna Eliecer Chamorro Vargas, salió al paso manifestando que debe existir un compromiso del gobierno con la aceleración de las obras y el financiamiento para la construcción de esta infraestructura, debido que existe la certificación del terreno ubicado a 15 kilómetros camino a San Pedro de Atacama.
El nuevo centro de detención preventiva tiene una inversión que supera los mil 21 millones de pesos y las obras civiles se estiman por los 121 mil millones de pesos.
En este sentido, el jefe comunal destacó “que con respecto al proceso del 2030 la operación de la cárcel está dentro de los plazos estimados, en cuanto a la concesión se requiere cerca de seis a ocho meses de adjudicación porque son licitaciones con cargo a tercero en que empresas concesionarias se hacen cargo de las obras civiles”.
Actualmente la cárcel de Calama, tiene una sobrepoblación que supera el 200 por ciento, por ende y conociendo esta problemática, el proyecto contempla en una primera etapa una capacidad para 980 reos, mientras que en el transcurso del tiempo está ira aumentando.
Seguridad máxima
Cabe destacar que este nuevo recinto penal es considerado de máxima seguridad, sin embargo, en cuanto a la posibilidad que ingresen altos líderes del crimen organizado el alcalde de la comuna es enfático en señalar su negativa a la propuesta manifestando que “nosotros queremos una nueva cárcel, pospuesto de máxima seguridad, apartada de la ciudad como corresponde, pero el hecho que se van a aglutinar los líderes del crimen organizado del norte no estoy de acuerdo debido que es un factor negativo para diversas temáticas de ciudad”.
En este mismo ámbito, la máxima autoridad destaca que esta propuesta no conviene a Calama porque la comuna tiene un sector minero importante donde los precios de mercado del cobre se cotizan a nivel internacional, por tanto, cuando hay inversiones del metal rojo lo primero que se fijan es en la seguridad del territorio. “Lo ideal es instalar cárceles en sectores donde la extensión territorial es bastante amplia. Hay que empezar a graficar este tipo de inversiones, se requiere un plan de inversión importante, agresivo, siendo indispensable adelantar recursos con gobiernos futuros para que estas iniciativas sean lo mejor posible”, destacó Chamorro.